El Soberbio Orinoco Volumen II
Synopsis
CAPÍTULO PRIMERO ALGUNAS PALABRAS DEL PASADO A las ocho de la mañana del 2 de octubre, las piraguas Gallinetta y Moriche, después de descender por el brazo que sigue a la derecha de la península de Atabapo, remontaban el curso del Alto Orinoco bajo un favorable viento de Noroeste. La víspera, después de la conversación del sargento Marcial y de Jacques Helloch, el primero no podía rehusar al segundo el permiso para que les acompañase, a su sobrino y a él, hasta la misión de Santa Juana. Ahora el secreto de Juana de Kermor era conocido por aquel que la había salvado, y no tardaría en serlo por Germán Paterne. Hubiera sido difícil que tal revelación no se efectuase, y hasta era preferible que lo fuera, dadas las circunstancias en las que iba a hacerse la segunda parte del viaje. Pero los dos jóvenes sabrían guardar el secreto con Miguel, Felipe, Varinas, Mirabal y el gobernador de la provincia. Al regreso, si las pesquisas producían el resultado apetecido, el coronel De Kermor tendría el placer de presentarles a su hija. Convínose también que ni Valdez, ni Parchal, ni ninguno de los marineros de las piraguas serían enterados de los últimos sucesos. Por lo demás, sólo aprob...